4/10/15

VA - Panorama wirtiano del garaje punk latinoamericano del sesenta.

Buenas noches estimados amigos del garaje. Hoy no les traigo nada novedoso, al menos para los habitués de los sonidos trogloditas que frecuentan este espacio. Pero es que hoy vengo con tonos catedráticos  e
iluminados. Les he preparado una clase magistral de “Garage Punk Latinoamericano del 60”. Para la actividad preparé  una antología de canciones que, desde mi punto de vista, constituyen una caracterización del movimiento. Obvio que no están todas las canciones, obvio que podemos discutir si algunas de las que están lo merecen. Porque, es verdad, la elección es una subjetividad mía. Pero bueno, para eso soy el amo y señor de este blog. Aclarados los pormenores, les cuento los parámetros que determinaron mi elección:
1º, canciones en castellano. Y no porque sea este el idioma predominante, gran cantidad se grabó en inglés. Pero estoy interesado en que escuchen bien el mensaje. No es que vamos a encontrar líricas excepcionales pero sí muy buenas. Además hay que tener presente que aún no llegábamos a ese momento en que el rock tomó conciencia de sí mismo como movimiento de ruptura y oposición respecto a las generaciones anteriores. En los sesentas todo era diversión, en apariencia. Lo cierto es que hay muchas canciones que atestiguan intensión contestaría que acercan al garaje punk a la frontera con un movimiento ideológico social. Acá he incluido algunos ejemplos de letras desafiantes.   
El 2º fue que las canciones no tuvieran fuzz. De este modo intenté mostrar el lado más visceral del movimiento.
Las canciones y las bandas.
Demoler de Los Saicos porque es necesariamente ineludible, es el cimiento de lo que se conoce como garaje punk. Uno de los motivos del revisionismo histórico en esta época fue el redescubrimiento de Los Saicos. Próceres del garaje mundial.
Los 4 Planetas, porque son de Mendoza, porque repercutieron en el país y grabaron piezas por demás bien ejecutadas. Muy crudas y siempre en clave surf. El link contemporáneo son Los Yetis con Jeans.
Ven que estoy hirviendo, versión de Los Iracundos. Bueno, otro antológico del garaje. Un punketazo que da por el piso con la imagen que tenés de ellos y reflexionás: Iracundos con ese sufijo que significa duración, intensidad. Son los que tienen la ira, son un grupo de rock. El garaje punk tiene una diferencia fundamental con el punk tradicional: el sonido. Este material fue grabado bajo condiciones tecnológicamente hablando inferiores a los que se hizo en el setenta. Tal cualidad, para algunos es un obstáculo, para otros un placer. Quienes gustamos de estos
sonidos trogloditas y cavernarios somos gente que gusta de lo sucio y despojado. La otra canción que hay en el compilado de Los Iracundos es Amame, clasicote del garaje punk grabado en vivo en no sé qué show pero sí que reúne muchas de las características del género: una guitarra desenfrenada, un ritmo cuadrado, de cuatro en cuatro, una voz cruda y lo que define por completo a este género: la desfachatez  juvenil. Porque este es un género, por excelencia, adolescente. Como nos dijeron que fue el grunge. Aunque, y gracias por eso, los chicos que tocaban grunge eran diez años mayores a los que tocaban garaje punk.
Después aparecen Os Bubbles y ese punketazo jip en que transformaron el Break it all de Los Shakers. Brasil tiene una historia abultada de rock. Junto a México y Perú son los países más importantes.
Sandro & Los de Fuego y una de las pocas canciones polenta que grabó nuestro querido Sandro.
Los Ovnis. Tremenda banda mejicana que tiene un más que merecido lugar en esta historia. Grabaron cinco discos con versiones y uno final, el más ácido y lisérgico, de canciones propias. Las “versiones”, este género
está plagado de versiones. Para algunos, eso es bueno y para otros no. Los amigos del garaje punk creemos que es genial. Porque testimonian un contexto en donde, para a grabar era condición versionar. Pero a las discográficas solo se cercioraban de que hubiera, dentro del material a grabar, hits vendibles, es decir hits foráneos. Era productos ya comprobadas. Por eso lo único que les importaba a los mercaderes era que se mantuviera la melodía. Lo demás era libre albedrío de la banda. Así nacieron versiones infinitas. Algunas serias, otras desfachatadas. Y Los Ovnis fueron expertos en versionar.
Los Shains, una banda peruana que tuvo la misma virtud que Los Ovnis: hacer versiones salvajes y potentes.
Los Jockers provienen de Chile. Fue una de las bandas más crudas de la escena rockera del vecino país.
La actitud y el sonido que buscaban los semejaron mucho a The Rolling Stones. No obstante, tenían vuelo propio. Esta canción es un claro ejemplo. El riff pesado y machacante está buenísimo.
Sonia es una chica española. Grabó principalmente bubblegum. Aunque por ahí se le escaparon algunos trallazos garageros como esta canción. La letra dice “Inventé a un señor que dice que me haría millonaria si de su detergente yo vendía cien envoltorios. Le dije: Hey, tú ¡vete de aquí!”. Algo parecido es el caso de la canción de Palito Ortega, Amanecer sin ti. Temazo que quedó punketero a pesar e Palito. Opuesto, en este sentido, es el caso de Tanguito & Los Dukes: una banda que intenta una propuesta más comercial, con punch y gancho y lo que le sale es un punk de tono festivo. Una joya.
También están Los Sleepers, con esa inmensa canción que es Zombie. Adelantan el sonido de The Cramps. Ni más ni menos.
Los Yorks otra banda que se especializó en hacer covers excelentes. Acá versionando a The Animals y, según la humilde opinión de un servidor; muchísimo mejor que la original.    
Roberto Carlos. El equivalente brasilero a nuestro Sandro. Aunque a mí me gusta más Roberto Carlos. Tiene mucha polenta para cantar. Esta canción atestigua.
Finalmente Los Corvets una banda ecuatoriana  que versionó a Los Gatos y otros grupos latinos. Acá con una tremenda adaptación de The Seeds. Otro cover que supera, según mi opinión, claro; al original.

Bueno, acá está, espero haber sido gráfico e ilustrativo. 
Antes de irme le mando super abrazo al coterráneo Paco Camorra  que me compartió un par de discos de Los Matemáticos